La
Araucana de Alonso de
Ercilla es un poema estructurado en quince cantos en los que se describe la
vida indígena americana con una amplia dosis de datos históricos y ficcionales
también. Como diría el investigador Marcos A. Morínigo en sus extensas palabras
introductorias la cuestión verosímil en el texto está dada en la propia
adaptación al género de la pieza, y no hay nada en ella que empalague al lector
debido a su razón y lógica, aunque el contenido de la fábula que cuenta Ercilla
presente un gran número de elementos imaginarios, como la propia invención de Caupolicán,
“que es con toda justicia, una de sus más flagrantes invenciones” (28-29). La
presente edición del libro cuenta no solamente con una sustanciosa introducción
de Morínigo sino además con apéndices, bibliografías selectas sobre el autor,
notas y una tabla de vocablos significativos que ayudan al entendimiento del
texto literario y las circunstancias históricas en las que fue creado.
En la introducción, se hace un amplio bosquejo
sobre la vida y obra del autor. Es notable, por ejemplo, la gran influencia de
Virgilio y Lucano en los versos de La
Araucana así como las reminiscencias de la moción de filosofía natural que
incluía conocimientos de astrología y astronomía (Morínigo 8). La primera parte
del libro se publica alrededor de 1568, con gran éxito. De la noche a la
mañana, Ercilla se da a conocer en todo el mundo hispánico como un “caballero
ilustre por el linaje, famoso soldado, de atractiva figura, célebre poeta, y
brillante cortesano,” aunque de modesta fortuna (Morínigo 12). Diez años más
tarde, prepara la impresión de la segunda parte de La Araucana y luego, en 1585 se dispone a dar fin a los fragmentos
más personales en su poema, escritos en Chile treinta años atrás (14). Morínigo
señala que en 67 octavas del texto se relatan “actos sobrehumanos” llevados a
cabo por españoles y araucanos. En dichos pasajes se “prueba por primera vez el
sabor de la guerra que el futuro le reservaba en tierras de Chile” (16). Los
relatos poéticos, afirma Morínigo, están imbuidos de episodios en los que se
prioriza la representación de los combates personales donde se describen a los
personajes de Caupolicán, Tucapel, Rengo, Galvarino, Ongolmo, Orompello y
Lincoya, quienes desafían todos los peligros, a la manera de los héroes
homéricos (17-18).
Otros detalles del texto se incluyen en las
subsecuentes páginas. Los preparativos del ataque, defensa y derrota de
Caupolicán y sus guerreros se describen usando algunas características
novelísticas en 104 octavas que terminan con la ejecución de trece caciques,
los cuales “son amarrados a la boca de un cañón y destrozados de un tiro”
(Morínigo 21). Vale destacar que Ercilla “realizó el milagro de transmutar en
su fantasía la materia histórica de la que fue testigo,” como dijera Morínigo,
para poder concentrarse en la creación del material poético de La Araucana que hace a los críticos e
historiadores cuestionarse frecuentemente los límites entre la realidad y la
ficción (26-27). Y es que La Araucana se concibió como poema
heroico-histórico, pieza literaria en primer lugar, que describe las hazañas de
los españoles y los indios, quienes –al decir de Morínigo- eran considerados como
personajes “sobrehumanos” en tiempos de la conquista (35).
No comments:
Post a Comment